jueves, 10 de diciembre de 2015

EJERCITA LA AR

¿Puede una persona con AR hacer ejercicio?

La respuesta es , el ejercicio puede provocar diversos beneficios en los usuarios con esta enfermedad. Durante muchos años los usuarios con AR permanecieron en un estado de inactividad por la creencia de que el ejercicio era perjudicial para sus articulaciones. En la actualidad, los profesionales que tratan esta enfermedad saben que estas opiniones no son reales.

De esta forma, si tiene AR el ejercicio ayuda sobretodo a: disminuir el dolor y la rigidez, mantener la flexibilidad de las articulaciones, fortalecer o aumentar los músculos que rodean las articulaciones. Además, ayuda a retrasar el deterioro del tejido óseo y cartilaginoso, incrementar la fortaleza de sus huesos, aumentar la capacidad para ejecutar las actividades diarias, mejorar el estado de salud, fortalece el corazón, disminuye la depresión y mejora el autoestima.

Hay diferentes tipos de ejercicios que pueden generar beneficios, suelen tener diferentes clasificaciones. Tres de estos TIPOS DE EJERCICIOS son básicos y deberían incluirse en cualquier programa deportivo:

     1. Ejercicios de Amplitud de Movimiento: ayudan a no perder más movimiento en las articulaciones y alivian la rigidez tras sufrir los brotes.

Antes de empezar a realizar ejercicios de amplitud de movimiento se debe revisar las articulaciones de pies a cabeza para saber cuales están rígidas y ejercitarlas más y con mayor cuidado.

Ejercicios de Amplitud articular
Estos ejercicios como se aprecian en la imagen lateral se realizan sin cargas ni resistencias. Mencionamos al final de la entrada, cómo ciertos de estos ejercicios pueden utilizarse en otras terapias alternativas. Por ejemplo, al realizar los ejercicios en el agua que genera que la presión disminuya (Hidroterapia).

Estos ejercicios pueden realizarse todos los días, en dos series de 3 a 10 repeticiones. Una serie es considerada como el número de veces que hace un ejercicio sin descansar entre repeticiones.


      2. Ejercicios de Fortalecimiento: favorecen el aumento o mantenimiento de la fuerza muscular en músculos que rodean las articulaciones y los de otras partes del cuerpo.

Estos ejercicios deben hacerse alternando con el descanso, un día si, un día no. 

                        Sujetar un papel con los dedos         Abducción de dedos en plastilina


      3. Ejercicio Aeróbico: ayudan a conservar la resistencia, estimulan corazón y pulmones, y disminuyen la fatiga en Actividades de la Vida Diaria (AVDs).

Este tipo de ejercicio puede ir desde rutinas de movimientos de todas las partes del cuerpo, hasta correr (si el grado de desarrollo de la enfermedad lo permite), pasando por bailes y otras actividades como zumba, actividades de elección muy frecuentes.

(Hemos querido poner algunos cómo ejemplo. No obstante, si va a realizar una planificación deportiva pincha en los links de los títulos y podrás consultar una gran variedad de ejercicios de los diferentes tipos)

Existen otro tipos de terapias alternativas que también pueden ayudar a lograr beneficios como por ejemplo la hidroterapia, el taichi o el yoga. Los ejercicios realizados en muchas ocasiones son básicos y se repiten en los diferentes programas diseñados.



¡Importante!, la REGLA DE LAS DOS HORAS consiste en fijarse en la aparición o no de dolor o si este empeora dos horas después de la práctica del ejercicio. Si es así, es probable que el ejercicio haya sido excesivo y para próximos días deberías tener en cuenta el esfuerzo y disminuirlo.

Pero entonces, ¿Existe un riesgo al hacer ejercicio? Cómo casi todo en esta vida, existe el riesgo sí, pero sí no se siguen las pautas y consejos que marcan los profesionales de la salud. Para que este riesgo sea algo trivial, debes acudir a tu médico antes de empezar a hacer ejercicio, y consultarlo con los demás profesionales que sigan tu tratamiento para poder complementar y crear una planificación lo más saludable posible para que los beneficios del ejercicio sean los mayores posibles y exista un riesgo mínimo. Así que ¡Ejercítate!

Para más información sobre el ejercicio y sus diferentes variaciones os dejamos los siguientes enlaces:
    Asapar - Asociación Salmantina de pacientes con Artritis Reumatoide
    Sermef - Sociedad Española de Medicina Física y Rehabilitación